Los Seductores Vinos de Gerard Bertrand en Alinna

El arte culinario y el vinícola unieron fuerzas en una noche de encanto y hedonismo, donde nuestros sentidos fueron partícipes en un juego de seducción y de placer. En Alinna, cada instante es una oportunidad de aventura, de creatividad y de asombro; en una de sus espectaculares cenas maridaje tuvimos el enorme gusto de dejarnos llevar por los vinos más exquisitos del sur de Francia, obras de arte embotelladas cuya historia, aromas, sabores y abanico de colores hipnotizan: Gerard Bertrand.
El carismático director de ventas para Latinoamérica de Gerard Bertrand, Eduardo Aguirre, nos llevó de la mano en nuestro descubrimiento de los maravillosos vinos que degustamos, platicándonos sobre la increíble trayectoria de Bertrand y los impresionantes resultados que han posicionado a la marca como el ícono de la región de Languedoc.
Elizabeth Cruz, la mente brillante detrás del catering y pop-up gastronómico Alinna, nos presentó el primer platillo de la cena elaborada por el ternos chef Pablo Palomo: un espectacular tartar de Wagyu trufado con crema de Dijon, yema curada, queso de oveja y patatas soufflé. Este manjar fue maridado con Prima Nature Chardonnay, un delicioso vino ecológico sin sulfitos añadidos que ofrece aromas especialmente puros, generosos y gourmet. Este vino es el resultado del saber hacer de Gérard Bertrand y sus enólogos, que tienen una experiencia única en la vinificación sin sulfitos.

El siguiente platillo fue un rico camarón de profundidad con beurre blanc, logrado a la perfección, y maridado con el premiado vino rosado Hampton Water Rosé. Este elixir es el resultado de una colaboración entre Jon Bon Jovi, su hijo Jesse Bongiovi y Gérard Bertrand; Hampton Water captura el arte de vivir y la convivencia común en los Hamptons y el sur de Francia, con su hermosa mineralidad y carácter fresco e intenso.
Continuamos con un refinado Velouté de pato con gelée de cebolla caramelizada, frutos secos y picatostes, de gran suntuosidad y aterciopelado sabor. Ideal para esta obra maestra, el Clos de Temple Rosé deleito a nuestros sentidos. Desde la bella botella del vino, que parecería más un perfume o una obra de arte, nos percatamos que estamos bebiendo algo fuera de lo común. Ganador del Mejor Rosé del Mundo 2020 en el Drinks Business Global Rosé Masters, esta joya proviene del terroir histórico de Cabrières, cuna de los vinos rosados y es envejecido durante 6 meses en barricas nuevas de roble francés. El terruño de Clos du Temple extrae su carácter singular de sus orígenes geológicos y el resultado es magia líquida.

El siguiente platillo nos sedujo con su abanico de aromas: puntalete carbonara con panceta y velo de pasas, maridado a la perfección con el Prima Nature Syrah, IGP Pays D’OC. Intenso y afrutado, Prima Nature nos proporciona una experiencia única de la variedad de uva, respetando el medio ambiente a la vez.
Para terminar el chef Palomo nos impresionó y deleitó en un short rib Wagyu full blood con salsa de pimienta verde ahumada y tarta de pimientos confitados, cada sabor creando una explosión de hedonismo en nuestra boca. El vino que acompañó a este maravilloso platillo fue el magistral Clos d’Ora 2016: un elixir excepcional, preservado a 200 metros de altitud y calificado con más de 94 puntos por Robert Parker Wine Advocate.
Refrescamos nuestro paladar con una nieve de mandarina con ron añejo y brindamos por mas momentos como esté, repletos de risa, cariño, deliciosa gastronomía y vinos excepcionales.
