La Santísima Trinidad, abanico de sensaciones

Con una vista panorámica de campos de lavanda, olivos y situada entre viñedos, La Santísima Trinidad nos transporta a la toscana. Este magnifico y bello hotel boutique es una edificación de sofisticación y exquisitez cuyo sabor y estilo no tiene igual en ningún lugar del mundo.
La Santísima Trinidad se encuentra entre dos pueblos mágicos, a unos minutos de San Miguel de Allende en dirección a Dolores Hidalgo, Guanajuato. Con un estilo único y muy suyo, La Santísima Trinidad es un desarrollo inmobiliario que nos ofrece la posibilidad de vivir y disfrutar la magia de tener una verdadera y hermosa finca en el campo.
Un lugar sobresaliente en donde nuestra única responsabilidad es disfrutar, aprender y relajarnos contemplando un maravilloso paisaje, este es el paraíso. Rodeada de naturaleza pura, viñedos y lagos artificiales, me encuentro con paz interna y momentos de contemplación que me alejan lentamente de la realidad del día a día.

La Santísima Trinidad fusiona un concepto arquitectónico y de paisajismo excepcional con la mejor tecnología enológica usada para obtener vinos de extraordinaria calidad. Como el hotel está concebido y dedicado a consentir a sus huéspedes, no se podría olvidar a uno de los más grandes placeres de la vida, aquí podemos a disfrutar de su menú basado en la altísima calidad de sus ingredientes, en su gran mayoría de elaboración artesanal propia y el maridaje perfecto con los mejores vinos de la región.
San Miguel de Allende es un gran compendio de elegancia cultural y arquitectónica, es la perfecta armonía de majestuoso pasado y belleza edificada. La Santísima Trinidad es un perfecto reflejo de esto, logrado con el mas exquisito gusto y atención al detalle.
Caminando entre sus viñedos, paseando a la orilla de sus lagos, descansando por su alberca o gozando de la panorámica vista desde la terraza de mi habitación, encuentro en La Santísima Trinidad algo mágico que no logro explicar, algo que se siente y respira en el aire mismo, que nos envuelve y enamora.
Cerca del pueblo mñagico de San Miguel de Allende lleno de cultura, historias y tradiciones, nos salpicamos con el colorido de sus callejones empedrados, de la arquitectura de las casonas antiguas, de museos y actores vestidos a la época que recrean los sucesos más significativos de antaño.
